Car and Driver participa en varios programas de afiliación de marketing, lo que significa que Car and Driver recibe comisiones de las compras hechas a través de los links a sitios de los vendedores.
El SUV compacto japonés se electrifica añadiendo a sus motores gasolinas una híbridación ligera a 24 voltios que le permitirá lucir la codiciada etiqueta ECO.
Mazda está lista para seguir electrificando su gama, y ahora le toca a uno de sus modelos más populares. Hablamos del Mazda CX-5, que este 2022 se va a renovar ligeramente con una gama ligeramente reestructurada y sobre todo una gama mecánica revisada para ofrecer por fin mecánicas electrificadas que le permitirán lucir la etiqueta ECO de la DGT.
Lo hará con la conocida fórmula e-Skyactiv G, un formato de hibridación ligera con red de 24 voltios, que ya conocemos de otros modelos de la marca como los compactos Mazda 3 y Mazda CX-30.
Así con esta nueva tecnología ahora contaremos con una gama mecánica que arrancará con el e-Skyactiv G de 2.0 litros con 165 CV y 213 Nm de par máximo, disponible con una caja de cambios manual o automática de 6 velocidades y con tracción delantera, mientras que un poco más arriba se presenta el e-Skyactiv G de 2.5 litros que asciende hasta los 194 CV y 263 Nm de par, en este caso únicamente disponible con cambio automático, aunque con la posiblidad de optar por tracción delantera o bien a las cuatro ruedas.
De esta forma todos los motores gasolina de la gama pasan a tener la tecnología M Hybrid de Mazda que con la compañía de un alternador reversible y una pequeña batería de 24 voltios permitirán reducir emisiones y consumos y ganarse la etiqueta ECO.
No ocurrirá lo mismo, sin embargo, con las mecánicas diésel, que seguirán manteniendose sin electrificar, con el motor Skyactiv-D 2.2 de 150 CV con cambio manual y tracción delantera y más potente el Skyactiv-D 2.2 de 184 CV que como con sus hermanos de gasolina se queda únicamente con cambio automático aunque con la posibilidad de elegir entre tracción delantera y tracción total.